Las cuevas pueden ayudar a mascotas con problemas de estrés, ya que al sentirse refugiadas dentro de ellas, sacian su instinto de protección y pueden descansar más tranquilas.
De forma general, debes medir a tu perro del hocico al comienzo de la cola y sumar entre 5 y 15 cm para conocer el diámetro de cama o cueva que necesitas.